POLÍTICA
27 de mayo de 2025
Intendentes radicales se rebelan: rechazan un frente con Milei y el PRO en Buenos Aires

Mientras el PRO y La Libertad Avanza avanzan en un acuerdo electoral para 2025, el Foro de Intendentes Radicales se planta contra una posible alianza con Javier Milei y condiciona a la conducción bonaerense de la UCR. Temen una fractura partidaria y un desconocimiento del trabajo territorial.
La tensión interna en la Unión Cívica Radical (UCR) se profundiza en la provincia de Buenos Aires. Mientras el oficialismo nacional del PRO y La Libertad Avanza (LLA) celebran avances en un eventual frente “anti kirchnerista” de cara a las elecciones legislativas de 2025, un grupo clave dentro del radicalismo bonaerense lanza un claro mensaje de rechazo. Se trata del Foro de Intendentes Radicales, compuesto por 27 jefes comunales, que mañana se reunirá con las autoridades partidarias para exigir que se descarte cualquier acercamiento con el espacio liderado por Javier Milei.
La alarma se encendió tras declaraciones del diputado libertario José Luis Espert, quien ratificó la intención de construir un frente “anti miseria, anti kirchnerista” junto al radicalismo, y confirmó contactos con el senador Maximiliano Abad, figura influyente dentro del partido centenario. Desde el entorno de los intendentes, sin embargo, aseguran que “Abad es un dirigente, no el partido”, y advierten que un acuerdo a espaldas de la estructura territorial sería insostenible.
“El radicalismo está muy lejos de LLA”, repiten desde el Foro, donde se multiplican las críticas a lo que consideran un intento de forzar una alianza que solo cuenta con el respaldo de una minoría. En ese contexto, la cumbre convocada para este miércoles en La Plata con el presidente del Comité de Contingencia, Miguel Fernández, se presenta como un punto de inflexión.
Los intendentes boina blanca alertan que un eventual pacto entre cúpulas partidarias puede desconocer las dinámicas locales donde existe convivencia política en gabinetes municipales y concejos deliberantes, tanto con sectores del peronismo como del propio PRO. “Hay acuerdos de gestión que no se pueden romper desde una oficina en Buenos Aires”, deslizó un jefe comunal del interior.
La efusividad con la que el PRO celebró el encuentro entre Cristian Ritondo y Karina Milei —encuentro que, según afirman, abrió la puerta a una alianza de cara a 2025— aumentó la presión sobre la UCR. “Vamos a construir una alternativa de gobierno que mire hacia 2027”, dijo Ritondo en diálogo con Radio Mitre, marcando el horizonte estratégico de la movida.
Pero los radicales del conurbano y del interior no están dispuestos a ceder tan fácilmente. Aseguran que la unidad partidaria está en riesgo si se fuerza una alianza con el mileísmo. “No es la voluntad de la totalidad, ni siquiera se ve viable en los comités de distrito”, remarcarán en el encuentro con Fernández.
Así, mientras los libertarios y el PRO afinan una maquinaria electoral conjunta, la interna radical se recalienta. La definición de la UCR bonaerense frente a este nuevo escenario podría marcar el rumbo del partido no solo en la provincia más grande del país, sino también en el plano nacional. La pulseada está en marcha, y la unidad opositora, lejos de consolidarse, se enfrenta a una nueva grieta.