La política mendocina vive por estas semanas una escena inédita de incertidumbre. Con las elecciones a la vuelta de la esquina, el gobernador radical Alfredo Cornejo mantiene un abierto malestar con Eduardo “Lule” Menem, el principal operador político de La Libertad Avanza, por la falta de definición sobre un posible frente común en Mendoza. La indefinición preocupa en la Casa de Gobierno y tensa la relación entre la UCR local y los libertarios.

A pesar de que Cornejo mantiene un vínculo aceitado con Javier Milei, la negociación local está empantanada. El motivo: Lule Menem no termina de garantizarle un acuerdo electoral al mandatario, que teme una ruptura similar a la ocurrida en otras provincias como Jujuy. La jugada que imagina Cornejo es similar a la que logró el chaqueño Zdero, quien evitó competir con listas libertarias en su territorio. Pero en Mendoza, el camino parece trabado.

El cortocircuito llegó al extremo cuando el propio Lule vetó el ingreso de Hebe Casado, vicegobernadora de Cornejo, a las filas de La Libertad Avanza. Casado, alineada con Patricia Bullrich y símbolo del intento de confluencia entre el radicalismo y el mileísmo, llegó a posar con la motosierra en plena campaña. Pero no fue suficiente. “Debo ser la única vicegobernadora apartidaria del país”, ironizó Casado. La afiliación sigue frenada y las internas arden.

En paralelo, Luis Petri también juega su propio partido. Tras competir por la gobernación en 2023 y luego integrar la fórmula presidencial con Bullrich, hoy ocupa el Ministerio de Defensa, pero mantiene diferencias abiertas con Karina Milei. De hecho, en el gobierno nacional suena con fuerza la posibilidad de postularlo en Mendoza como una forma elegante de sacarlo del Gabinete. El diálogo entre Petri y Cornejo sigue activo, aunque lleno de desconfianzas mutuas.

La suspensión de las PASO locales es otro capítulo caliente. Con votos garantizados en el Senado mendocino, Cambia Mendoza avanza para eliminar las primarias este año. El petrismo, en cambio, impulsa su restitución y denuncia maniobras en su contra durante el último congreso radical. Incluso presentaron una impugnación formal.

Mientras tanto, los libertarios puros, como el Partido Demócrata y el Partido Libertario, se preparan por si quedan fuera del esquema oficialista. Barajan nombres para competir en solitario si no hay acuerdo. Desde históricos como Marcos Niven hasta referentes jóvenes como Ángeles Bermejo, todos esperan definiciones mientras siguen el desarrollo desde la tribuna. La posibilidad de alianzas alternativas —incluso con sectores del Partido Verde o el difonsismo— ya no parece tan lejana.

Mendoza, clave para Milei por sus bancas en el Congreso, es hoy un tablero de piezas sin acomodar. Karina Milei, tras semanas de gira internacional, deberá tomar cartas en el asunto. ¿Habrá coalición o estallará todo por los aires? El reloj corre y los enojos también.