POLÍTICA
21 de febrero de 2025
Escándalo en el Senado: La UCR protagonizó un papelón y salvó a Milei de la investigación por la criptoestafa

Rodolfo Suarez deslizó que hubo presiones desde Nación para que los radicales frenaran la comisión investigadora.
El bloque radical quedó en el centro de la polémica tras votar en contra de su propio proyecto para investigar el escándalo del Libragate. Rodolfo Suarez, senador nacional y exgobernador de Mendoza, aseguró que hubo presiones del Gobierno nacional hacia los gobernadores radicales para que sus senadores rechazaran la iniciativa.
En una de las sesiones más tensas del Senado, el oficialismo logró bloquear la creación de la comisión investigadora por la estafa con la criptomoneda $LIBRA, en la que se vio involucrado el presidente Javier Milei. Sin embargo, lo más llamativo no fue la postura de La Libertad Avanza o sus aliados, sino el bochornoso cambio de postura de un grupo de senadores de la Unión Cívica Radical (UCR), que terminaron votando en contra de su propio proyecto.
La iniciativa, impulsada por el radical Pablo Blanco, buscaba investigar la presunta responsabilidad de Milei y su entorno en la promoción de la criptomoneda. En un principio, contaba con el apoyo del bloque radical, e incluso su presidente, Eduardo Vischi, había firmado el proyecto. Sin embargo, en una sorpresiva jugada, Vischi y otros seis senadores radicales terminaron votando en contra.
Las presiones del Gobierno y el papelón radical
El senador mendocino Rodolfo Suarez, quien sí apoyó la creación de la comisión investigadora, se refirió a lo sucedido y deslizó que hubo presiones del Gobierno nacional hacia los gobernadores radicales para que sus senadores se dieran vuelta. “Lo que pasó es que en el bloque hubo distintas opiniones”, dijo Suarez, pero luego dejó entrever que la Casa Rosada habría operado para frenar la investigación.
En particular, mencionó el caso de Eduardo Vischi, quien, a pesar de haber firmado el proyecto, lo terminó rechazando. “Hubo una presión del Gobierno nacional a su provincia para que votara de otra manera. Nosotros le preguntamos por qué votó como lo hizo y nos dijo que lo llamaron desde la gobernación para pedirle que vote por mandar el proyecto a comisión”, reveló Suarez.
El exgobernador de Mendoza también remarcó que la falta de un presupuesto nacional actualizado deja a los gobernadores radicales en una situación de dependencia de los fondos discrecionales que maneja el Ejecutivo. “Todo está en manos exclusivamente del presidente. Existe un gigante grado de arbitrariedad para manejar los fondos”, advirtió.
Votaciones que generaron indignación
La primera votación en el Senado había logrado un amplio apoyo para tratar el tema sobre tablas, con 53 votos a favor y 17 en contra. Sin embargo, en la segunda votación, necesaria para aprobar la creación de la comisión, el resultado fue de 47 votos a favor y 23 en contra, quedando a un voto de la mayoría especial requerida.
¿Qué pasó en el medio? Seis senadores radicales que habían apoyado el debate terminaron votando en contra del proyecto: Mariana Juri (Mendoza), Eduardo Galaretto (Santa Fe), Stella Maris Olalla (Entre Ríos), Víctor Zimmermann (Chaco), Gabriela Valenzuela (Corrientes) y Eduardo Vischi (Corrientes). Desde el propio bloque radical calificaron la actitud de Vischi como “un papelón” y no descartaban cuestionar su continuidad como jefe de bancada.
“Una vez que se presentó el proyecto, ¿cómo vas a votar en contra?”, se preguntó Suarez, reflejando el desconcierto y malestar dentro del propio radicalismo.
La reacción de la oposición y las críticas al oficialismo
El bloque de Unión por la Patria (UxP) no tardó en reaccionar ante el giro de los radicales. José Mayans y Juliana Di Tullio fueron lapidarios en sus discursos, denunciando la falta de transparencia y señalando que Milei había confesado su vínculo con la criptomoneda.
“El Presidente confesó ser un corrupto y la hermana otra corrupta. No hablen más de corrupción porque tienen un presidente corrupto”, lanzó Mayans, mientras que Di Tullio ironizó sobre el cambio de postura de los radicales: “No sea cosa que los llame un gobernador o se parrillen entre ustedes”.
Desde el bloque libertario y sus aliados del PRO intentaron desviar la atención atacando al kirchnerismo, pero evitaron defender abiertamente a Milei. En tanto, el senador Ezequiel Atauche intentó postergar el debate enviándolo a comisión, aunque sin éxito.
Un mensaje preocupante para la política argentina
El desenlace de la votación dejó en evidencia la fragilidad del bloque radical y su falta de autonomía frente a las presiones del Gobierno nacional. El episodio también generó una fuerte decepción en el electorado, al confirmar que, una vez más, las negociaciones políticas y la presión sobre los gobernadores pueden más que la transparencia y la búsqueda de justicia.
“Después nos llenamos la boca quejándonos de que la gente no cree en la política”, sentenció el peronista Daniel Bensusán, resumiendo el sentimiento de frustración que dejó el escándalo en el Senado.