La condena a Cristina Fernández de Kirchner por la causa Vialidad generó repercusiones en todos los niveles de la política argentina, incluso en escenarios donde pocos lo esperaban. Esta vez, el cruce estalló en Rivadavia, donde el director provincial de Relaciones con la Comunidad, Hernán Amat, salió al cruce del intendente interino, Luis García Llauró, por sus críticas al fallo de la Corte Suprema contra la expresidenta.

García Llauró, quien ocupa interinamente la intendencia por la licencia médica de Ricardo Mansur, había expresado en medios locales que si bien “la corrupción debe ser siempre castigada”, consideraba que el fallo “no ha sido constitucionalmente bueno”. Incluso comparó la celeridad de la causa Vialidad con otros expedientes judiciales que involucran a dirigentes opositores, como el caso Correo Argentino o la causa Banelco, que llevan años sin resolución.

“No puede ser que haya expedientes judiciales que duerman décadas en los tribunales y que otros, como este, salgan en apenas dos meses. Eso genera desconfianza en la Justicia”, argumentó García Llauró, quien proviene del Partido Socialista y actualmente integra Sembrar, un partido departamental fundado por el propio Ricardo Mansur luego de su salida de la Unión Cívica Radical.

Las declaraciones no pasaron desapercibidas. Desde sus redes sociales, Hernán Amat —funcionario del Ministerio de Seguridad y Justicia de Mendoza y exsecretario de Gobierno durante la gestión de Miguel Ronco en Rivadavia— respondió con dureza.

“Nos gobiernan personas que desconocen los temas públicos, que no saben planificar, administrar ni gestionar. Están muy lejos de ofrecer una gestión moderna”, lanzó Amat. Y agregó: “Rivadavia merece más. Necesitamos que nos gobierne gente formada, comprometida y honesta. Que entienda que la política no es un negocio entre amigos, sino una vocación de servicio”.

El cruce expuso, además, viejas tensiones políticas en el Este provincial. Hernán Amat tiene un largo recorrido político ligado a la UCR local, con vínculos directos con Ricardo Mansur, quien fuera intendente por el radicalismo antes de fundar Sembrar, espacio que gobierna actualmente Rivadavia. Incluso Amat fue candidato a intendente por el oficialismo departamental y formó parte de la gestión de Miguel Ronco, último jefe comunal radical.

El choque verbal entre Amat y García Llauró refleja más que una simple diferencia sobre un fallo judicial: es el capítulo más reciente de una interna política que atraviesa al oficialismo de Rivadavia desde hace años, marcada por rupturas, pases de partido y disputas por el control político del municipio.

Por lo pronto, Rivadavia sigue siendo gobernada de forma interina por García Llauró, mientras Ricardo Mansur continúa con su recuperación tras el ACV sufrido en abril. Pero el escenario político local anticipa un clima agitado de cara a los próximos meses.