La denuncia, publicada por el sitio CoinDesk y replicada por La Nación, involucra a la hermana del presidente en una trama de presunta corrupción ligada al lanzamiento de la criptomoneda $LIBRA, que resultó ser una estafa millonaria.

En los mensajes filtrados, Davis afirmó con contundencia: “Yo controlo a ese negro. Le envío dinero a su hermana y él firma lo que yo digo y hace lo que yo quiero”. Estas declaraciones, fechadas en diciembre pasado, sugieren que los pagos habrían sido clave para obtener respaldo presidencial en la promoción de $LIBRA.

Coimas, lavado de dinero y un escándalo que crece

El caso $LIBRA se convirtió en un fraude financiero que perjudicó a más de 44.000 inversores y habría generado ganancias ilegales por unos 100 millones de dólares. Según Davis, parte de ese dinero sigue en su poder y advirtió que no lo devolverá hasta recibir instrucciones del entorno presidencial. “Se lavaron las manos. Si quieren que lo devuelva, lo hago, pero no me dijeron una mierda”, expresó enojado.

Las acusaciones se extienden más allá de Davis. Charles Hoskinson, creador de Ethereum, reveló que allegados a Milei le pidieron dinero a cambio de organizarle una reunión con el presidente. “Danos algo y podrían pasar cosas mágicas”, le habrían dicho. Esto constituye una presunta violación a la ley estadounidense de Prácticas Corruptas en el Extranjero (FCPA).

Por su parte, el experto en finanzas descentralizadas Diogenes Casares también afirmó que se pagó un soborno de cinco millones de dólares para lograr que Milei promocionara la criptomoneda. Mientras que el analista británico Nick O’Neill aseguró que funcionarios del gobierno libertario estuvieron directamente involucrados en el lanzamiento de $LIBRA.

Karina Milei, en el centro de la tormenta

La hermana del presidente aparece como la principal implicada en el escándalo. Según trascendidos, estaba al tanto de las amenazas de Davis y se mostró preocupada por el avance de la investigación. Durante el fin de semana, presionó para que el ministro de Justicia, Mariano Cúneo Libarona, dejara su cargo y se dedicara a su defensa ante las denuncias que están proliferando en Argentina y Estados Unidos.

La respuesta del gobierno ha sido ambigua. Durante una entrevista con Jony Viale, Milei evitó referirse directamente a Davis, a pesar de que el oficialismo intentó instalar la idea de que se trata de un estafador que operó por cuenta propia. Sin embargo, la posibilidad de que el FBI intervenga en la investigación preocupa a la Casa Rosada, ya que el empresario asegura tener toda la operación documentada.

El ex senador Jorge Yoma sintetizó la situación con una frase lapidaria: “Donde el FBI lo apriete un poco, este gordillo canta la Misa Criolla en arameo y con lenguaje de señas”.

Mientras las acusaciones siguen sumando nombres y detalles, el escándalo amenaza con convertirse en el primer gran golpe de corrupción contra la administración Milei.