Unión por la Patria sigue con rispideces pero ahora detras de la unidad encarnada por Massa y como se sabe el poder ordena, por más enojos y requemores los derrotados no tienen más que buscar su lugar y ver de que forma juegan para mantener el poder un período más, las primeras mediciones le dan la razón al armado detrás del actual ministro de economía como la figura que otorga cierta competitividad al espacio oficialista de cara a las elecciones del próximo 13 de agosto.

En la primer semana tras el volantazo político del oficialismo donde tomaron la desición de unirse pese a todo y se dice pese a todo porque aún con las listas definidas siguen las reuniones entre los principales dirigentes para acercar posiciones. De hecho fue la misma vicepresidenta en su primera aparición pública luego del cierre la que criticó de manera directa al presidente al señalarlo como el embanderado de las PASO que según la visión de la ex presidenta era un evidente error al ser perjudicial para el espacio que llega debilitado producto de una interna que ha atravesado más de la mitad del tiempo que el oficialismo lleva al frente del país. En ese sentido también se conocieron las posturas en la previa del cierre de listas donde la vicepresidenta aseguró que su idea inicial era con Sergio Massa a la cabeza pero sin PASO y que de haberlas Wado era la opción más orgánica. Otro de los trascendidos fue el hecho de que Daniel Scioli quien intentó hasta el final se sentiría “traicionado” por el “Albertismo” ya que desde ese lugar lo dejaron armar mientras se cree que al mismo tiempo se negociaba la unidad sin él en los planes, de hecho algunas acusaciones cruzadas en la interna peronista afirman que el quinto lugar legislativo era para Scioli y que habría sido ocupado por Cafiero principal alfil del presidente. La reunión de Scioli con Cristina y posterior agenda para con el flamante candidato a la presidencia parecen abalar todo esto.

Lo cierto es que Massa volvió a ratificar sus ponderaciones como un animal político que siempre encuentra las formas y que es dueño de un gran “timing” que lo hace certero y eficaz casi lo opuesto al actual presidente que está fuera de foco hace meses y como pocas veces antes visto sin chances aún en el poder hace más de un año.

Además el ministro de economía capitalizó en la semana todo lo que su candidatura de unidad generó, es conocido que dentro del oficialismo es el más cercano al denominado círculo rojo y también es amigable para con los mercados financieros, sobre todos los extranjeros que recibieron la noticia impulsando los bonos de deuda argentina y con ellos las principales acciones del país en los mercados.

En cuanto lo netamente político la movida es la que se preveía, los números que asoman hablan de una reñida contienda electoral camino a la presidencia pero esta vez con el oficialismo en carrera, la fórmula que encabeza Massa parece ser al menos competitiva y pone al justicialismo nacional en carrera, obviamente no es la única variante, colabora de manera directa la interna feroz desatada en la oposición que está ensimismada en las PASO perdiendo perspectiva general, increíblemente las últimas semanas de Juntos por el Cambio solo se caracteriza por dichos cruzados entre los candidatos presidenciales Bullrich y Larreta dejaron de lado las formas para atacarse directamente mientras que Carrió se dedicó a Mauricio Macri y sus formas en las intervenciones mediáticas, desde el llano sus dirigentes territoriales se encuentran desorientados al ver la crudeza de cada cruce y entendiendo que en las generales la única forma será la de encolumnarse detrás del ganador de las PASO si lo que se busca es competencia.

Por otra parte el armado de Milei en cuanto a territorio ha sido de lo más complicado para el libertario que en las encuestas de imagen figura como competitivo pero en las muestras que fueron dando las elecciones provinciales se ve claramente como el territorio pesa y como este punto es su debilidad electoral, a Milie pareciera faltarle estructura, territorio, tracción local y sobre todo un fuerte electoral que los demás ya tienen. En la Ciudad de Buenos Aires Larreta tiene su núcleo de votantes más duro y eso significa un  piso importante para comenzar además de un armado a nivel país apoyado sobre su vice Morales que es un hombre fuerte del radicalismo y asegura tener en cada provincia estructura territorial para dar competencia. Por su parte Patricia Bullrich no realizó en la previa un gran trabajo en ese sentido recorriendo cada una de las provincias y buscando referencia propia trazando cercanías con los radicalismos provinciales y reforzando su candidatura con un radical duro como Petri; lo que deja al libertario descolocado en el armado es su falta de presencia en las provincias y sobre todo la ausencia de un bastión donde refugiarse y desde el cual construir, a esto hay que sumarle la lógica de los medios hegemónicos que en época de campaña poner valor a los espacios, espacios que hasta la fecha Milei obtenía de manera gratuita y hoy en día esa variante, quizá no contemplada por el Libertario, le pasa factura ya que en las últimas semanas ha mermado su exposición mediática, algo a lo que no estaba acostumbrado y de lo que uno de sus principales referentes como Ramiro Marra salió a denunciar en sus redes sociales.

Así es como la política argentina ha demostrado una vez más su dinamismo cambiante y lo que hasta hace semanas parecía sentenciado pone a todos los sectores casi a la par llevándolos a pensar cada movimiento y declaración con especial atención; a medida de que se acerca el 13 de agosto cada detalle cuenta y demostrado está que en Argentina puede suceder cualquier cosa.