ECONOMÍA
30 de junio de 2025
Golpe del mercado al modelo Milei: tras JP Morgan, Pimco habría retirado USD 1.600 millones

Primero fue el banco más poderoso de Wall Street, ahora lo seguiría uno de los fondos más grandes del mundo. La salida de capitales por temor al atraso cambiario, la pérdida de reservas y los ruidos electorales amenaza con pinchar el carry trade argentino.
Los gigantes de Wall Street le dan la espalda al experimento libertario de Milei
Una señal de alarma encendió los mercados financieros esta semana: después de un contundente informe de JP Morgan que desaconseja la inversión en títulos argentinos, ahora crecen los indicios de que el fondo Pimco —uno de los jugadores más grandes e influyentes del planeta— habría desarmado posiciones por 1.600 millones de dólares.
El informe de JP Morgan, difundido bajo el irónico título “Tomándose un respiro”, recomienda abandonar el carry trade argentino —la estrategia de obtener ganancias mediante la inversión en pesos con altas tasas— debido a un combo explosivo: atraso cambiario, déficit externo récord, riesgo político creciente y señales de intervención en el mercado de futuros del dólar.
La entidad financiera, la más poderosa de la Bolsa de Nueva York, señala que el modelo de Milei genera incertidumbre: “Con el pico de ingresos agrícolas ya consumado, salidas constantes por turismo y posibles ruidos electorales, preferimos dar un paso atrás y esperar mejores niveles de entrada”.
Esa advertencia no quedó en palabras. En la City porteña, operadores hablan de una operación millonaria entre privados que se concretó el viernes pasado, coincidiendo con las filtraciones del informe. Si se confirma que la venta por 1.600 millones de dólares fue protagonizada por Pimco, podría marcar un antes y un después en la relación del Gobierno con los grandes fondos de inversión.
Pimco no es un actor menor. Conocido por su fuerte presencia en mercados emergentes, tiene además una larga historia con el ministro Luis “Toto” Caputo, a quien ya acompañó en su paso por el gobierno de Mauricio Macri, con resultados que dejaron sabor amargo tanto a fondos como a pequeños inversores.
“El mercado no espera. Pimco conoce el paño y si decidió retirarse, es porque ve venir turbulencias”, explicó un operador con décadas de experiencia en el microcentro porteño. Y agregó con tono grave: “Esto recuerda al 2018, cuando los capitales se anticiparon al colapso”.
En la lectura de los analistas, este giro en la relación entre el Gobierno y los fondos más grandes del mundo podría marcar el fin del idilio financiero que sostenía artificialmente el tipo de cambio. La combinación de atraso cambiario, creciente presión sobre las reservas y una economía sin motor productivo propio empieza a encender luces rojas.
El revés electoral en Santa Fe, donde el oficialismo no logró buenos resultados, también suma tensión: en Wall Street no descartan que Milei sufra un fuerte golpe en las elecciones legislativas del año que viene, lo que pondría en jaque la viabilidad de su plan de gobierno.
Mientras tanto, en Buenos Aires el clima es de inquietud. Si se profundiza la salida de capitales, el Gobierno se verá obligado a recalibrar su estrategia financiera. El mercado —como tantas veces en la historia argentina— vuelve a marcarle el ritmo a la política.