NACIONALES
8 de diciembre de 2024
La angustia de los jubilados por la quita de medicamentos gratuitos del PAMI
El nuevo esquema del PAMI deja a miles de jubilados sin remedios esenciales. Farmacéuticos denuncian situaciones desesperantes y critican las decisiones que priorizan la lógica presupuestaria sobre la salud de los adultos mayores.
Desde la implementación de nuevas restricciones para acceder a medicamentos gratuitos en el PAMI, miles de jubilados enfrentan una realidad angustiante al llegar a las farmacias. El cambio, que obliga a tramitar un “subsidio social” para quienes perciban ingresos menores a $388.500, ha provocado confusión y desamparo entre los beneficiarios.
El caso más alarmante ocurrió en Córdoba, donde un jubilado de 67 años intentó prenderse fuego en una oficina de PAMI como protesta por la interrupción del acceso a los remedios. Aunque fue detenido antes de concretar el acto, este hecho extremo refleja el nivel de desesperación que atraviesan muchos mayores.
El impacto en las farmacias y los jubilados
Alejandra Gómez, presidenta del Colegio de Farmacéuticos de Buenos Aires, asegura que la mayoría de los jubilados se retira de las farmacias sin comprar los medicamentos que antes recibían gratuitamente. “Vienen a buscar sus remedios, pero al enterarse del cambio se van con angustia. Averiguan los precios, que suelen ser prohibitivos, y no pueden pagarlos”, explica.
El fin del plan Vivir Mejor, que garantizaba la gratuidad de medicamentos, marcó un antes y un después. Aunque previamente ya se habían eliminado coberturas para ciertos tratamientos, esta última medida dejó a miles sin alternativas. “Esto no solo afecta a los jubilados, sino también a las farmacias, que ven disminuido su trabajo y enfrentan el desafío de sostener su viabilidad”, añadió Gómez.
En zonas rurales y barrios, las farmacias pequeñas intentan paliar la situación ofreciendo soluciones temporales. “En algunos casos se entrega un blíster con la promesa de regularizar el trámite después. Pero no deja de ser angustiante”, señala Germán Daniele, presidente del Colegio Farmacéutico de Córdoba.
Daniele también critica el procedimiento burocrático exigido para acceder al beneficio, calificándolo como innecesario, dado que el Estado ya posee la información económica de los jubilados. “Un análisis basado únicamente en el presupuesto puede resultar más costoso a largo plazo, porque las consecuencias de interrumpir tratamientos serán graves para la salud de los jubilados y para las finanzas del sistema de salud”, advierte.
Abandono de tratamientos y aumentos desmedidos
Según Rubén Sajem, director del Centro de Profesionales Farmacéuticos Argentinos, muchos jubilados ya han comenzado a abandonar sus tratamientos. “Los costos de los medicamentos, que oscilan entre $40.000 y $90.000, son imposibles de asumir para la mayoría. Además, el trámite para recuperar la cobertura es largo y genera incertidumbre. Esta situación causa un enorme malestar”, sostiene.
Un informe del Centro de Economía Política Argentina (CEPA) revela que desde noviembre de 2023, los medicamentos para adultos mayores acumulan un aumento del 210,7%, superando la inflación general del período (201,5%). Más alarmante aún es el incremento del 340,7% en los remedios con cobertura PAMI.
Daniele también critica la reciente renovación de los convenios entre el PAMI, las farmacias y los laboratorios, que aumentó las contribuciones de las farmacias mientras redujo las de las industrias farmacéuticas. “La obligatoriedad de prescribir genéricos hubiera aliviado la situación, pero fue eliminada rápidamente bajo presión del lobby de los laboratorios”, señala.
Un sistema que prioriza a los laboratorios
La falta de previsión en la implementación del nuevo esquema y la presión de los laboratorios generan indignación en farmacéuticos y beneficiarios por igual. “El sistema está claramente desequilibrado, favoreciendo a la industria en detrimento de los jubilados y las farmacias”, concluye Daniele.
Mientras tanto, miles de jubilados enfrentan un futuro incierto, donde la interrupción de tratamientos podría costarles mucho más que dinero: su salud.