Viernes 26 de Diciembre de 2025

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POLÍTICA

26 de diciembre de 2025

El Presupuesto del ajuste llega al Senado: La Salud Mental, el nuevo campo de batalla contra el "Déficit Cero"

En una sesión maratónica este viernes, el oficialismo busca sancionar el Presupuesto 2026. Mientras la Casa Rosada presiona por el equilibrio fiscal, organizaciones sociales y especialistas denuncian un desfinanciamiento crítico en áreas sensibles y un retroceso "manicomial" en la legislación.

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El Senado de la Nación es hoy el escenario de una votación que definirá mucho más que números: definirá el límite de la tolerancia social al ajuste. El proyecto de Presupuesto 2026, que ya cuenta con media sanción de Diputados, llega al recinto con una carga de controversia inédita. Bajo la premisa innegociable del "déficit cero", el Gobierno ha decidido pasar la tijera por programas que, para muchos, son la última red de contención antes del abismo.  

Salud Mental: ¿Reforma o desmantelamiento?

El punto más álgido de la jornada es la intención del Ejecutivo de reflotar cambios estructurales en la Ley de Salud Mental. Tras bambalinas, el oficialismo busca facilitar las internaciones involuntarias y devolver protagonismo a las instituciones monovalentes (manicomios), algo que la ley vigente intentaba erradicar.

"Están usando el presupuesto como un Caballo de Troya para desarmar conquistas de derechos humanos bajo la excusa de la eficiencia", denuncian desde la Asociación Civil por la Igualdad y la Justicia (ACIJ). Los datos son alarmantes: el presupuesto para el programa de "Apoyo y Promoción de la Salud Mental" sufriría un recorte real frente a una demanda que, paradójicamente, no para de crecer debido a la crisis económica.

Gobernadores en la mira y el fantasma del veto

La negociación es frenética. El Gobierno ya avisó que, si los senadores "dialoguistas" intentan reincorporar partidas para universidades o discapacidad que fueron dadas de baja en Diputados, Javier Milei no dudará en aplicar el veto total o parcial. Esta amenaza mantiene a los gobernadores en una posición incómoda: necesitan fondos para sus provincias, pero temen quedar pegados a un ajuste que ya empieza a facturarles políticamente en sus territorios.

Mientras tanto, en las afueras del Congreso, trabajadores de la salud y movimientos sociales mantienen una vigilia. Para ellos, no se trata de una discusión técnica sobre partidas; se trata de la supervivencia de un sistema de salud que ya opera "con el alambre" y que en 2026 podría enfrentar su colapso definitivo.

 

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